La Jane de Tarzán… buf... ¿Qué puedo decir de ella?
Bien, me voy a permitir hoy una licencia, como la de decir que supongo que a alguno le puso en su tiempo Weissmuller, y a otros, incluso, Chita,a mí en mi infancia la que me puso, lo confieso, fue Jane.
Es algo que está ahí latente, escuchar el TAM TAM, ver la jungla en blanco y negro, y soñar con ella con ojos inocentes son cosas que van intrínsecas.
¿O no eran tan inocentes? Puede que no y que con ella se disparese por primera vez mi imaginación. Lo siento, lo tenía que poner. Es el consejo que el siquiatra de Woody Allen me ha dado para superar el trauma infantil. Aún puedo...
Jose no se que ha pasado no puedo escribir nada nuevo. Si lo lees me respondes en Huequitos, he cambiado mi direccion de correo, todas creo me las han hackeado.
ResponderEliminar